La nueva serie protagonizada por Ricardo Darín ya es furor en Argentina y promete marcar un antes y un después en la ficción nacional.
Desde su estreno el 30 de abril, El Eternauta no solo arrasa en reproducciones en Netflix: también trae al presente una de las obras más emblemáticas de la historieta argentina, cargada de resonancias históricas, políticas y culturales que no pueden pasarse por alto.
La serie, dirigida por Bruno Stagnaro (Okupas, Un gallo para Esculapio), reinterpreta el clásico creado por Héctor Germán Oesterheld en 1957, y lo hace con una potencia visual nunca antes vista en una producción local: 140 días de rodaje, 38 locaciones y una Buenos Aires apocalíptica bajo una nevada mortal perfectamente recreada gracias a innovadores efectos especiales.
Una historia que atraviesa generaciones
En El Eternauta, Ricardo Darín da vida a Juan Salvo, un hombre común que debe sobrevivir en una ciudad desolada tras una letal invasión extraterrestre. Pero más allá del relato de ciencia ficción, lo que distingue a esta historia —y lo que Netflix logra conservar— es su profunda reflexión sobre la solidaridad, el valor colectivo y la resistencia frente a lo desconocido.
La historieta original de Oesterheld no fue solo una pieza artística: fue también una denuncia velada al autoritarismo y un grito en defensa del pueblo. De hecho, su autor y sus cuatro hijas fueron víctimas de la última dictadura militar argentina. Oesterheld desapareció en 1977, y su historia personal se convirtió en un símbolo de la lucha por la memoria, la verdad y la justicia en el país.
Más que una adaptación: un homenaje a toda una tradición
Argentina tiene una de las tradiciones más ricas de la historieta en América Latina, con autores como Quino (Mafalda), Roberto Fontanarrosa, y el mismo Oesterheld, que marcaron generaciones con sus obras. En ese contexto, El Eternauta no solo fue un hito de la ciencia ficción local, sino una de las primeras historietas en retratar a un héroe colectivo: un grupo de personas comunes que, unidas, enfrentan el horror.
La serie mantiene ese espíritu. Aunque introduce cambios para actualizar el relato y atraer a nuevas audiencias, la esencia de la obra sigue intacta. La Buenos Aires nevada, los trajes protectores improvisados, las decisiones humanas bajo presión, todo se entrelaza en una narrativa que se siente, todavía hoy, urgente y necesaria.
Un elenco que respira autenticidad
Además de Darín, el elenco incluye a Carla Peterson, Andrea Pietra, César Troncoso, Ariel Staltari, Marcelo Subiotto, Claudio Martínez Bel, Orianna Cárdenas y Mora Fisz. Cada actor y actriz aporta matices que profundizan el costado humano de una historia de supervivencia.
Lejos de copiar modelos internacionales, El Eternauta se sostiene en su identidad local. No es otra serie de zombies o futuros distópicos: es una crónica emocional y social en escenarios reconocibles para cualquier argentino.
¿Por qué es esencial ver El Eternauta hoy?
Porque más allá de su calidad artística, El Eternauta nos conecta con una parte vital de nuestra historia: nos recuerda que el arte también es resistencia, que la memoria no puede ser enterrada, y que las grandes batallas, como las grandes catástrofes, no se enfrentan en soledad.
La serie está disponible completa en Netflix y cada episodio es una invitación no solo al entretenimiento, sino también a la reflexión.
