El primer censo de la comunidad swinger en Argentina, llevado a cabo por la Asociación Civil Swinger Liberal Argentina (ASLA), ofrece una visión detallada de esta práctica. Con una participación de más de 1.300 personas, se estima que más de 1.3 millones de argentinos se identifican como swingers. El conurbano bonaerense lidera la concentración con el 45% de los encuestados, seguido por la Ciudad de Buenos Aires y Mar del Plata. Además, el censo reveló que el 66% de los participantes son parejas, mientras que el resto se distribuye entre hombres y mujeres solas.
Entre las motivaciones para participar en el mundo swinger, el 80% menciona la búsqueda de nuevas experiencias sexuales, mientras que un 60% destaca la importancia de la libertad individual y el respeto mutuo en las relaciones. Además, el 75% de los participantes afirmó que esta práctica ha fortalecido la confianza y comunicación con sus parejas.
El perfil sociodemográfico de los swingers en Argentina indica que la mayoría se encuentra entre los 35 y 45 años de edad, y en términos educativos, la mayoría tiene estudios secundarios completos y un 20% cuenta con títulos universitarios. También se observa que muchos de los encuestados pertenecen a sectores medios y altos, lo que refleja cierta tendencia socioeconómica dentro de esta comunidad.
El censo también resalta que, aunque esta comunidad ha crecido en los últimos años, muchos aún optan por la discreción, ya que solo el 40% de los participantes manifiesta estar cómodo compartiendo públicamente su estilo de vida.
Los códigos del mundo swinger
No todos son parejas como muestra la encuesta de ASLA en la comunidad. A las chicas solas se las denomina unicornio y a los chicos single. Hay parejas que buscan single, otras unicornios y también puede ser otras parejas.
A los outsider de este mundo, la comunidad los denomina “vainilla”. Un “amigo horizontal” es aquella amistad del ambiente swinger y “amigo vertical” es aquel externo a esta cultura. En las fiestas swingers puede haber personas que solo observan a otros tener relaciones sexuales, que son los voyeurista. Mientras a la iniciación de una persona dentro de este mundo la llaman “evangelizar”.
Fuente: Infobae