Una alimentación saludable ayuda a fortalecer el sistema inmunológico que siempre está activo pero su actividad aumenta si un patógeno consigue atacar el cuerpo humano.
En “Patas Arribas”, la Licenciada en Nutrición, Andrea Botta, en su columna junto a Ricardo Bustos hablaron sobre la importancia de una alimentación saludable para reforzar las defensas del cuerpo en procesos de enfermedades cortas como las respiratorias (gripe, bronquiolitis, etc.) y del sistema digestivo como gastroenteritis, gastritis, entre otras.
La licenciada expresó que: “Es importantísimo tener una alimentación saludable porque las enfermedades consumen nutrientes, por ejemplo, cundo tenemos una gripe o una enfermedad respiratoria el organismo utiliza las propias reservas para afrontar el proceso. El sistema inmune o defensas se construye con vitaminas, minerales y proteínas y es vital comer muchas veces al día alimentos que contengan los nutrientes que necesitamos, es decir, consumir alimentos que tengan agua como las frutas, verduras, incluso, los frutos secos tienen muchos nutrientes (proteínas, minerales, entre otros). La hidratación y una alimentación saludable son procesos fundamentales para obtener un buen sistema inmune”.
Por ejemplo, para las enfermedades respiratorias la vitamina C, A, proteínas y el hierro son primordiales consumirlas, la carne con vegetales verdes oscuros es una combinación muy buena. Otra opción muy nutritiva es la el arroz con lentejas o pastas con brócoli, entre otras. El consumo de yogures, lácteos ayudan a fortalecer nuestro sistema inmune.
Por otro lado, Botta, hizo hincapié en el consumo de dulces: “debemos tener cuidado con los dulces y las golosinas en los niños como así también, en los ancianos cuando están en proceso agudo respiratorios; tenemos que evitar que se consuman en esos procesos porque todo lo que sea muy dulce aumenta el dióxido de carbono e incorporamos menos oxígeno”.
En otro aspecto, la profesional de la salud, explicó: “cuando se presentan problemas en el aparato digestivo la hidratación es fundamental de a sorbitos para evitar cualquier tipo de problemas. Se puede vivir mas de 40 días sin alimentos, pero no se puede vivir mas de 2 días sin agua porque las células se deshidratan, aumenta la temperatura corporal y esto es muy riesgoso. El líquido viene a mantener la temperatura del cuerpo. Es importante en estos procesos evitar la fibra, todo alimento crudo y con cáscara”.
Por último, la nutricionista, expresó: “hacemos hincapié en estos procesos cortos con respecto a lo que es respiratorio o procesos cortos digestivos en estas pautas para estos días. Si los procesos se complican o continúan el paciente debe consultar con su médico porque es importante que la alimentación sea la correcta, la adecuada porque si no genera otra problemática”.
