Nueva terapia experimental muestra avances contra el alzhéimer en ratones

Un hallazgo esperanzador de la UPV/EHU podría transformar el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas.


Científicos de la Universidad Pública Vasca (UPV/EHU) han logrado un importante avance en la lucha contra el alzhéimer. Un nuevo fármaco desarrollado por el equipo de Neuroquímica y Neurodegeneración no solo ha demostrado ser capaz de proteger el cerebro, sino también de revertir parte del daño causado por esta enfermedad en ratones. Los animales sometidos al tratamiento recuperaron habilidades cognitivas esenciales, marcando un prometedor punto de partida para futuras investigaciones.

El secreto está en los sistemas cannabinoide y colinérgico
El compuesto, identificado como WIN55.212-2, actúa activando el sistema cannabinoide, el cual juega un papel clave en la protección cerebral, al tiempo que estimula el sistema colinérgico, responsable de funciones como la memoria y el aprendizaje.

Según el doctor Rafael Rodríguez Puertas, líder del proyecto, este mecanismo potencia la producción de acetilcolina, un neurotransmisor crítico para las capacidades cognitivas. “Hemos observado que los receptores cannabinoides activados por el fármaco reestablecen la memoria y las habilidades de aprendizaje en ratones afectados por daño cerebral”, explicó. Por su parte, la doctora Marta Moreno Rodríguez destacó que “los animales tratados llegaron a comportarse como aquellos sin ningún daño cerebral”.

Innovación técnica y nuevas posibilidades
El equipo utilizó herramientas pioneras desarrolladas en la UPV/EHU para analizar lípidos cerebrales con una precisión sin precedentes. Gracias a esto, pudieron confirmar que el tratamiento aumentaba tanto la actividad de los receptores cannabinoides como la producción de lípidos precursores de acetilcolina.

Además de su potencial en el tratamiento del alzhéimer, los investigadores creen que esta terapia podría extenderse a otras enfermedades neurodegenerativas, como el párkinson. “Nuestro organismo ya tiene mecanismos para proteger el cerebro; este fármaco simplemente amplifica esa capacidad”, añadió Rodríguez.

Retos en el horizonte y colaboración internacional
A pesar del avance, el desarrollo enfrenta desafíos. La molécula empleada no puede ser patentada, lo que limita el interés de las grandes farmacéuticas. Por ello, el equipo colabora con instituciones como el CIC bioGUNE y la Universidad de Vigo para identificar compuestos similares que puedan ser comercialmente viables.

Los próximos pasos incluyen estudios de toxicidad y la eventual realización de ensayos clínicos en humanos. Aunque el camino aún es largo, este descubrimiento representa una luz de esperanza para millones de personas afectadas por el alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas, demostrando que la ciencia sigue siendo una herramienta poderosa para mejorar vidas.