Cinco acciones para reducir el riesgo de deterioro cognitivo

Grandmother with grandchildren applying a dry maple leaves using glue while doing arts and crafts

El Instituto de Neurología Cognitiva, brindó una serie de acciones para reducir el riesgo de demencia desde la infancia y adolescencia.

La demencia ha disminuido en varios países, seguramente, debido a las mejoras en la educación, nutrición, atención médica y los cambios en el estilo de vida.

En la actualidad Actualmente existe al menos 12 factores de riesgo modificables para la demencia como la hipertensión, discapacidad auditiva, tabaquismo, obesidad, depresión, inactividad física, bajo nivel educativo, diabetes, bajo contacto social, consumo excesivo de alcohol, lesión cerebral traumática y la contaminación del aire.

Los 12 factores de riesgo modificables representan alrededor del 40% de las demencias en todo el mundo que, los cuales podrían prevenirse.

Guido Dorman, miembro del Departamento de Geronto-Neuropsiquiatría y de la Clínica de la Memoria de INECO, mencionó que “las contribuciones al riesgo y la mitigación de la demencia comienzan temprano y continúan durante toda la vida, por lo que nunca es demasiado temprano o demasiado tarde. Estas acciones requieren tanto de programas de salud pública como también de intervenciones individualizadas”.

El profesional de la salud compartió algunos ejercicios que, aplicándolos desde edades tempranas de la vida, podrían ayudar a prevenir las demencias:

1.  Los niveles más altos de educación infantil y el logro educativo más alto a lo largo de toda la vida reducen el riesgo de demencia. La ciencia sugiere que la capacidad cognitiva general aumenta, con la educación. Por lo cual, la estimulación cognitiva es importante que se desarrolle especialmente en los primeros años de vida. 

2.  Es importante proteger la cabeza de los golpes, ya que diversos estudios han demostrado que la exposición a traumatismos de cráneo graves o leves, sería un factor de riesgo para el desarrollo de deterioro cognitivo.

3.  Consumir alcohol de manera excesiva se asocia con cambios cerebrales, deterioro cognitivo y demencia.

4.  Se estima que el 35% de los adultos no fumadores y el 40% de los niños están expuestos al humo de segunda mano, conocidos como “fumadores pasivos”. La exposición al humo de segunda mano se asocia con un mayor deterioro de la memoria.

5. Utilizar el vehículo de forma responsable y usar el cinturón de seguridad, lo cual aplica para todos aquellos que se encuentren dentro del vehículo, para de esa manera evitar traumatismos.

Además, es importante intentar reducir la contaminación que puede generarse a partir del uso del mismo, dado que, por ejemplo, la alta concentración de dióxido de nitrógeno se asocia con una mayor incidencia de demencia.

Fuente: Infobae.com