
El oficialismo logró que Diputados convierta en ley la reforma de alquileres con 128 votos afirmativos contra 114 negativos. La normativa establece que los contratos entre propietarios e inquilinos se mantendrán por tres años y tendrán una actualización semestral, en lugar de anual como establecía la actual norma.
Con la sanción de este proyecto los contratos se mantienen en tres años los cuales deberán ser estipulados “en valor único en moneda nacional y por períodos mensuales sobre el cual podrán realizarse ajustes con periodicidad a intervalos no inferiores a seis meses”. También, el Senado modificó el mecanismo de actualización del precio de los alquileres y estableció que “los ajustes deberán efectuarse utilizando un coeficiente conformado por la menor variación que surja de comparar el promedio del 0,9 de la variación del coeficiente salarial publicado por el Indec y la variación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), publicado por el BCRA”.
En el cierre del debate, la secretaria parlamentaria del bloque del Frente De Todos, Paula Penacca, afirmó que el problema “no es la ley” sino el contexto económico y dijo que una “de las cosas que mejora es que elimina la posibilidad que el inquilino haga pagos adelantos”. Dijo que “el problema empieza cuando en el año 2018 se llega a una devaluación anual de 100% y por lo tanto la expectativa de propietarios e inmobiliarias no coinciden con lo que logran ganar. Y esto lo dice Reporte Inmobiliario, que no es un pasquín kirchnerista”. “Con la ley aprobada en el Senado se mejora la situación de los inquilinos”, destacó.
Desde la oposición, la vicepresidenta radical Karina Banfi afirmó: “Como nosotros queremos ayudar a la parte más débil, venimos pidiendo la derogación de la ley de alquileres sancionada en 2020. Como no tuvimos mayorías, lo que hicimos en agosto fue derogar los dos artículos más nefastos. En 2019, cuando se debatió por primera vez, se nos advirtió que se retraería la oferta y eso fue lo que pasó. En 2020, por la pandemia, se congelaron los alquileres. Lo que tenemos hoy es un desorden absoluto, en el marco de una crisis económica y habitacional. Este combo es letal”.
Por último, el diputado del PRO Pablo Tonelli expresó su rechazo al proyecto impulsado por el oficialismo al señalar que “la aplicación de la ley provocó una enorme retracción en la oferta de viviendas para alquilar. Esto perjudica a los inquilinos dada la escasez de la oferta, les impide negociar en igualdad de condiciones los términos del contrato”.





