El Banco Central de la República Argentina, confirmó que los nuevos billetes de $10.000 y $20.000 comenzarán a circular este año y en un homenaje a los héroes de la patria, el billete de $10.000 presentará en su anverso a María Remedios del Valle, junto a Manuel Belgrano en el frente.
La elección de María Remedios del Valle, símbolo de lucha y resistencia, refleja un cambio significativo en la representación de las figuras históricas del país.
María Remedios del Valle, de descendencia africana, fue una militar argentina. Nació el 8 de noviembre de 1766 en Buenos Aires, entonces capital de la provincia o gobernación del Río de la Plata, en el Virreinato del Perú.
María Remedios se distinguió primero como enfermera durante la segunda invasión inglesa. Su compromiso y lealtad la llevaron a ser reconocida por Belgrano, quien la nombró capitana de su ejército. Fue una de las llamadas niñas de Ayohúma, aquellas que asistieron al derrotado ejército de Manuel Belgrano en la batalla de Ayohúma.
Durante la revolución del 25 de mayo de 1810, se unió a la expedición auxiliar al Alto Perú en la 6.ª Compañía de artillería volante, junto a su marido y dos hijos, quienes lamentablemente fallecieron en la campaña.
Continuó sirviendo durante la campaña del Alto Perú, en Huaqui y en la retirada subsiguiente. Antes de la batalla de Tucumán, pidió a Belgrano permiso para atender a los heridos en primera línea, siendo inicialmente rechazada pero luego ganándose el apodo de “Madre de la Patria” por su valentía en el frente. Tras la victoria, Belgrano la nombró capitana.
Finalizada la guerra, María Remedios del Valle, ya anciana, residía en un rancho situado en las afueras de Buenos Aires, en una zona de quintas. Frecuentaba los atrios de las iglesias de San Francisco, Santo Domingo y San Ignacio, así como la Plaza de la Victoria (hoy Plaza de Mayo), donde vendía pasteles y tortas fritas o pedía limosna. Se hacía llamar “la Capitana”, pero quienes la escuchaban pensaban que estaba loca.
El 23 de octubre de 1826, Del Valle inició una gestión solicitó una compensación por sus servicios a la patria y por la pérdida de su esposo e hijos. El 24 de marzo de 1827, su petición fue rechazada por el ministro de Guerra.
En 1827, mientras mendigaba en la plaza de la Recova, fue reconocida por el general Juan José Viamonte, quien la identificó como “la Capitana” y una heroína. Del Valle le relató sus intentos infructuosos de pedir ayuda en su casa y Viamonte presentó un proyecto para otorgarle una pensión ante la Junta de Representantes que finalmente se le otorgó.
El 16 de abril de 1835, por decreto de Juan Manuel de Rosas, María Remedios del Valle fue asignada a la plana mayor activa con su grado de sargento mayor. Rosas aumentó significativamente su pensión, más del 600%, como reconocimiento a sus contribuciones. En la lista del 28 de octubre de 1847, se registra su último recibo de pensión, que ascendía a 216 pesos.
En un registro del 8 de noviembre de 1847, se anota que “la mayor de caballería Dña. Remedios Rosas falleció”, marcando el fin de la vida de una figura histórica notable en la lucha por la independencia de Argentina.