En la mañana de Comunicándonos recibimos al Padre Raúl Massini, quien compartió detalles sobre la llegada de la Virgen de Guadalupe a María Juana y la región, un acontecimiento que despierta gran emoción y fe en la comunidad.

La Virgen de Guadalupe es una de las advocaciones marianas más reconocidas en el mundo católico. Su aparición se remonta al año 1531 en el cerro del Tepeyac, México, cuando la Virgen María se manifestó al indígena Juan Diego Cuauhtlatoatzin, pidiéndole que se construyera un templo en aquel lugar. Como prueba de su presencia, dejó estampada su imagen en la tilma del vidente, reliquia que aún se conserva en la Basílica de Guadalupe, en Ciudad de México, y que se convirtió en un símbolo de fe, unidad y esperanza para millones de creyentes.
El Padre Massini destacó que esta visita es una oportunidad única para los fieles de la zona, quienes podrán acercarse a rezar y renovar su confianza en la Virgen, considerada “la Madre de todos los pueblos de América”. Su presencia invita a reflexionar sobre la importancia de la fe, la solidaridad y el compromiso comunitario.
De esta manera, la llegada de la Virgen de Guadalupe a María Juana se convierte en un momento especial de encuentro espiritual, abierto a toda la comunidad y cargado de significado religioso e histórico.