Cuenta la leyenda que Cleopatra, sedujo al César para que este la apoyara en su campaña contra Potino el eunuco. “Cleopatra fue la más hábil de todas”, escribía Isaac Asimov en Los egipcios (Alianza).
No se sabe cuán hermosa pudo haber sido según los cánones modernos, o si realmente lo fue o no, pues ningún retrato suyo ha perdurado hasta la actualidad. Sin embargo, el hecho es que, bella o no, poseía el don de atraer a los hombres, y era consciente de ello.
De hecho, desembarcó en Alejandría y desde allí envió una gran alfombra a César. Los hombres de Potino no vieron razón alguna para interceptar el regalo, al fin y al cabo era una simple alfombra. No obstante, lo que nadie sabía era que Cleopatra estaba envuelta en aquella alfombra. La estratagema de Cleopatra funcionó a la perfección. El sorprendido César quedó deslumbrado ante la joven que apareció al desenrollarse la alfombra.
Gracias a sus dotes conquistó a César y ambos terminaron con el conflicto egipcio. Potino fue capturado y ejecutado. Cleopatra y Julio César se convirtieron en amantes hasta el fallecimiento de este último.
Y vos, ¿qué técnica utilizas a la hora de seducir?
Compartimos la columna “Nuestros dilemas” del sábado pasado de la Licenciada en Psicología y sexóloga, Alicia Calosso – MP 7631 – para Cuarentena2.